Materiales necesarios
• 1 Vaso liso de cristal
• Agua hervida dejándola enfriar
Se vierte el agua hervida en el vaso y se espera a que se enfríe. Sobre la boca del vaso se apoya la mano derecha y se dice el siguiente ritual con voz firme y segura. Hay que leerlo despacio y concentrarse en el contenido del texto. La frase reza así:
"En el nombre del creador invoco a los espíritus benefactores para que deshagan las malas influencias que hubiera sobre mi o que mis enemigos me hubieran lanzado.
Los invoco para que pongan un buen remedio en este vaso de agua, para que mi cuerpo reciba los efluvios benéficos para que deshagan cualquier hechizo en mi contra, ya sea a distancia o por el malas intenciones". Acto seguido se bebe el agua lentamente y, luego, se repite la oración.
Si lo hacéis con mucha fe, notaréis una mejoría clara. La hora adecuada para realizar este ritual es a primera hora de la mañana, antes de desayunar. También se puede hacer por la noche. Se puede repetir las veces que uno quiera.
• 1 Vaso liso de cristal
• Agua hervida dejándola enfriar
Se vierte el agua hervida en el vaso y se espera a que se enfríe. Sobre la boca del vaso se apoya la mano derecha y se dice el siguiente ritual con voz firme y segura. Hay que leerlo despacio y concentrarse en el contenido del texto. La frase reza así:
"En el nombre del creador invoco a los espíritus benefactores para que deshagan las malas influencias que hubiera sobre mi o que mis enemigos me hubieran lanzado.
Los invoco para que pongan un buen remedio en este vaso de agua, para que mi cuerpo reciba los efluvios benéficos para que deshagan cualquier hechizo en mi contra, ya sea a distancia o por el malas intenciones". Acto seguido se bebe el agua lentamente y, luego, se repite la oración.
Si lo hacéis con mucha fe, notaréis una mejoría clara. La hora adecuada para realizar este ritual es a primera hora de la mañana, antes de desayunar. También se puede hacer por la noche. Se puede repetir las veces que uno quiera.
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